En el sexenio actual se duplicó el número de organizaciones de la sociedad civil que colaboran con el gobierno en diversos temas, sin embargo el de los migrantes requiere mayor atención, porque el problema está creciendo.
La directora del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) María Angélica Luna Parra, señaló lo anterior, y planteó que “en un año cruzaron más de 25 mil niños solos que venían de Centroamérica, quienes reciben atención en los albergues, al igual que unos 11 mil niños mexicanos.
En el marco de su informe de labores, recordó que en 2012 las instancias del gobierno federal tenían contacto con seis mil organizaciones de la sociedad civil, mientras que en 2016 ya son 12 mil las que tienen contacto con el gobierno.
Ante el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade Kuribreña, la directora del Indesol refirió que el número de organizaciones de la sociedad civil registradas pasó de 19 mil 800, a más de 36 mil actualmente.
Destacó que esas cifras demuestran confianza en el gobierno, porque algunas organizaciones muy viejas de más de 80 años, no estaban registradas. La sociedad civil está cambiado, tiene gran capacidad de auto gestión, lo que hace que se multipliquen las organizaciones, dijo.
En el año 2015, recordó, Indesol invirtió 24 millones 300 mil pesos en su programa de coinversión, mientras que en 2016 se llegó a más de 30 millones.
También recordó que en 2015, Indesol apoyó a mil 524 organizaciones de las cuales 249 fueron reconocidas este día por el impacto y compromiso social.
En su oportunidad, Meade Kuribreña resaltó el papel de la sociedad civil en la actual estrategia de inclusión del gobierno federal, y reconoció que “no es fácil ser sociedad civil en México”.
Pero dicha relación comenzó a cambiar desde hace 20 años, en que gobierno y sociedad han aprendido mutuamente, y las organizaciones han encontrado voz en diferentes instrumentos jurídicos y programas de gobierno.
“Nos entretenemos en discutir si estamos midiendo bien o mal, si en las estadísticas se aprecian subreportes o truncamientos, si son comparables, y perdimos de vista que lo que está detrás del trabajo de desarrollo social es una realidad que debemos transformar”.
El secretario de Desarrollo Social finalizó que, sin embargo, “hay una realidad que no podemos transformar solos”, para la que se requiere el apoyo de la sociedad civil.
NTX