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La posibilidad de que México cuente con la vacuna contra el dengue en 2016 “es importante y un avance para el país, porque podría ayudar a eliminar esta enfermedad”, afirmó hoy aquí la secretaria mexicana de Salud, Mercedes Juan.
En rueda de prensa con motivo de su visita de trabajo de dos días a Francia, explicó que las investigaciones de la farmacéutica francesa Sanofi -en las que participa México- ya están en la fase clínica que está siendo exitosa y concluirían con ello.
“Lo que estamos viendo es si es México quien haga el registro sanitario, se está viendo si cumple los requisitos de la Cofrepris (Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios) y si se plantea comercializarla a finales de 2015 sería México el primer país con la vacuna”, dijo.
Recordó que México es un país que tiene al dengue como enfermedad endémica, por eso participa desde el inicio de las investigaciones hace casi 10 años, y ahora tiene interés en que se comercialice la vacuna.
“Para nosotros es importante porque, aunque han disminuido los casos de dengue entre 2013 y 2014 en un 50 por ciento, con el cambio climático el mosquito del dengue vive también en sitios altos, de mil 800 metros sobre el nivel de mar, ya no es sólo de zonas de mar o tropicales”, enfatizó.
Indicó que hay estados de México que antes no tenían dengue y ahora han registrado casos, por lo que junto con el saneamiento y la prevención contar con la vacuna podría ayudar a eliminar la enfermedad.
Aclaró que la vacuna contra el dengue no protege contra la chikungunya, a pesar de que es el mismo vector el que la transmite.
Al responder preguntas sobre las acciones contra la obesidad emprendidas por el gobierno mexicano, destacó que se establecieron impuestos a las bebidas azucaradas y los alimentos de alta densidad calórica.
Señaló que ahora la dependencia a su cargo se encuentra a la espera de los resultados para saber si ha bajado su consumo.
Juan abundó que en la Encuesta Nacional de Salud de 2012 se conoció que 30 por ciento de la población tiene obesidad y 30 por ciento sobrepeso, así como que uno de cada tres niños tiene obesidad, y por eso se considera un problema muy serio en el país.
Refirió que se espera a partir de julio el nuevo etiquetado de productos alimenticios, que pasa de ser voluntario a ser obligatorio para especificar contenidos y porcentajes de sal, azúcar, grasa, calorías, entre otros elementos.
“Creo que ningún producto, ni ninguna bebida es dañina ni se debe satanizar. El problema es cómo se consume y el equilibrio con la activación física, que es otro tema sobre el que hemos trabajado”, expresó.
Dijo que este tema fue uno de los más importantes que dialogó con la ministra francesa de Asuntos Sociales, de la Salud y Derechos de las Mujeres, Marisol Touraine, con quien se reunió el jueves en la sede del ministerio.
En esta visita, Juan se reunió con el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), José Ángel Gurría, con quien repasó diversos programas en los que participa México, que preside el Comité de Salud en el organismo.
Además, visitó el Instituto Pasteur de investigaciones médicas, porque le interesa reforzar la colaboración a través de un memorándum que beneficiará a los institutos nacionales de salud en México.
La titular de la Secretaría de Salud de México concluyó su visita a París con un recorrido por la sede “Henri Mondor” del Sistema de Atención Médica de Urgencia (SAMU) con el que se plantea mayor colaboración para los estados mexicanos que tienen esquemas de este tipo.
NTX
