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La Comisión Nacional del Agua (Conagua) entregó hoy al gobierno municipal de Hermosillo, la Planta Tratadora de Aguas Residuales (PTAR), que se construyó con una inversión de mil 119 millones de pesos.
El director general de la Conagua, Roberto Ramírez de la Parra, señaló que previo a la operación de la planta tratadora, ubicada al poniente de la ciudad, sólo se trataba el 9 por ciento de las aguas negras y ahora se alcanzará el 100 por ciento.
Acompañado de la gobernadora Claudia Pavlovich y el alcalde de Hermosillo, Manuel Acosta Gutiérrez, dijo que con el inicio del funcionamiento de la PTAR, esta ciudad se convirtió en la quinta capital del país en tratar la totalidad de sus aguas residuales.
Recordó que transcurrieron 22 años entre conflictos sociales para que se pudiera construir esta planta tratadora.
“Las plantas de tratamiento para eso son, no para poder tratar el agua y volverla a echar al río y que esté limpia, sino para poder aprovechar esa agua que ahora es escasa como en lugares como este”, subrayó.
Ramírez de la Parra mencionó que por ello que se debe buscar la forma de reutilizar el agua saneada, como será el caso de la que se genera en la PTAR de Hermosillo, de la cual el 60 por ciento se destinará al uso agrícola en la zona poniente del municipio.
Con esto, anotó, los productores agrícolas, que cultivan forraje principalmente, tienen la oportunidad de reconvertir sus cultivos para aprovechar el agua tratada de una mejor manera.
Por su parte, el subdirector general de Agua Potable y Saneamiento de la Conagua, Francisco Javier Muñiz Pereyra, precisó que la PTAR de Hermosillo tiene capacidad para tratar dos mil 500 litros de agua por segundo.
Cuenta con cinco módulos que tratan 500 litros por segundo cada uno a través de un proceso biológico y tratamiento anaerobio de los lodos, cuyo manejo permite producir gas y generar la energía eléctrica que se consume en la operación de la misma planta.
La ley obliga a que las aguas residuales sean tratadas y de 1996 al año 2012, el organismo operador de agua de Hermosillo tuvo que reconocer obligaciones fiscales y establecer un compromiso y programa de obra para llegar al tratamiento de aguas, anotó.
Con la entrada en operación de esta planta de tratamiento, en noviembre de 2016, la cobertura de saneamiento en Sonora se incrementa del 38 al 73 por ciento.
