El Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) determinó un aumento del salario mínimo de 4.2 por ciento, vigente a partir del 1 de enero de 2016, con lo cual pasó de 70.10 a 73.04 pesos diarios.
En conferencia de prensa, el presidente de la Conasami, Basilio González Núñez, dio a conocer que con este incremento la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo real alcanzó el 4.39 por ciento, el más alto en las últimas siete administraciones federales.
Refirió que esta determinación se tomó considerando que la inflación será de alrededor de 2.0 por ciento, de acuerdo con información que hoy mismo les dio a conocer el gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens.
Agregó que el consejo estima que con el incremento de 4.2 por ciento para 2016 y con una inflación estimada por el Banco de México de 3.0 por ciento para el mismo año, se tendrá de nuevo una recuperación del poder adquisitivo del millón 35 mil trabajadores de tiempo completo que ganan el salario mínimo de hasta el 50 por ciento de la inflación esperada.
Destacó que la Conasami seguirá estudiando la forma de avanzar en la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo, tomando en consideración la productividad y sin que se afecten el empleo y las demás variables económicas fundamentales.
González Núñez puntualizó que el Consejo de Representantes tripartito (autoridades, empleadores y trabajadores) valida ampliamente el diseño y aplicación de la política de finanzas públicas que viene realizando la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Explicó que dicha estrategia contribuye de manera fundamental a que el país crezca y se den las condiciones para mantener ese cimiento en el futuro, en beneficio de los mexicanos.
Manifestó que en lo relativo a los salarios mínimos profesionales, se decidió que aumenten en la misma proporción en que lo hizo el salario mínimo general, conservando para cada profesión, oficio o trabajo especial el mismo porcentaje de percepción por arriba del mínimo general, que fue determinado en función del grado de calificación requerido para desempeñarlo.
Hizo notar que la decisión de fijar esos montos para los salarios mínimos generales profesionales se tomó de manera unánime, por décimo tercer año consecutivo, preservando el diálogo franco y abierto entre los factores de la producción.
Al referirse al proceso legislativo de desindexación del salario mínimo, comentó que esto permitirá que la Conasami continúe el análisis para encontrar mecanismos como la productividad y competitividad, que permitan una constante y sostenida recuperación del poder de compra de los trabajadores.
También señaló que existe total independencia y respeto a las negociaciones salariales contractuales, y sostuvo que el incremento a los salarios mínimos generales no deben ser tomados como referente obligado para esos acuerdos entre empresas y sindicatos en sus revisiones anuales.
Basilio González subrayó que el subsidio para el empleo que incrementa el ingreso de las y los trabajadores, por su parte, se aplicará en los términos obligatorios y directos que se encuentren vigentes a partir del 1 de enero de 2016, con independencia de los salarios mínimos de la resolución tomada hoy.
En la conferencia de prensa, el representante de los trabajadores, José Luis Carazo, expuso que aunque para el sector obrero este aumento no es el esperado y no los deja conformes, lo cierto es reconocer el esfuerzo que se está haciendo para alcanzar la recuperación real del poder adquisitivo.
Indicó que la petición original de la representación de los trabajadores al inicio de este proceso de revisión fue del 10 por ciento, pero aclaró que se tratan de cifras que siempre están sujetas a negociación.
Sostuvo que entienden que la fijación del aumento al salario mínimo en este momento no es un tema que deba estar al arbitrio de sectores políticos o gubernamentales, sino que es producto del consenso de los factores de la producción y la autoridad, con base en factores económicos reales.
Por su parte, Tomás Natividad Sáncheaz, a nombre de la representación patronal en la Conasami, dijo que el incremento a los salarios mínimos fue responsable, y destacó que si se hubieran dejado llevar por las presiones “demagógicas” de algunos sectores que pedían incrementos mayores, el aparato productivo nacional no lo resistiría.
No obstante, dejó en claro que los empresarios del país comparten la necesidad de que se vayan estableciendo reglas y normas para que las percepciones de los trabajadores mejoren, pues con ello se activa el mercado interno y el consumo.
Empero, puntualizó que se trata de un proceso que llevará algún tiempo, aunque ya se están dando pasos firmes para que ello ocurra, como la homologación de las zonas económicas y salariales.
Además la desindexación del salario mínimo y la contención de variables inflacionarios, que a final de cuentas sí permitirán tal recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores y preservarán la planta productiva del país.
Notimex