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El Sistema Nacional de Transparencia implica un enorme avance para México en sus leyes y en la construcción de una cultura de la rendición de cuentas, aseguró Jacqueline Peschard, coordinadora del libro “Hacia el Sistema Nacional de Transparencia”.
Entrevistada por Notimex, la investigadora de la UNAM y ex titular del desaparecido IFAI, aseguró que hoy en México la gente ya sabe que la información
pública le pertenece a todos y cuenta con un andamiaje institucional sólido para hacer valer su derecho a la información.
Antes de presentar su libro, donde participan entre otros, Catalina Botero, Sergio López Ayllón y Eduardo Bohórquez, la investigadora reconoció, que “el Legislativo nos debe todavía piezas importantes como la Ley de Protección de Datos en poder del Sector Público y la Ley General de Archivos”.
Aunque el empuje de la sociedad civil, académicos y periodistas de investigación llevó a escalar el alcance del acceso a la información pública, a través de la reforma constitucional, aún nos queda “una ruta larga por andar”, hacia el cambio cultural.
Sin embargo, hay avances importantes como el alcance universal de este derecho, pues cualquier persona, con mucha facilidad, puede solicitar información pública, incluso en condiciones mejores que en países desarrollados.
México es hoy el paradigma del entramado legal e institucional en materia de transparencia para América Latina y tiene mejores condiciones, por ejemplo, que Canadá, donde es condición ser ciudadano, para solicitar información pública, cosa que en México no ocurre.
Las leyes en materia de transparencia y la existencia del INAI, organismo garante con fuerza y herramientas para hacer valer el derecho a la información, es producto de un proceso relacionado con la libertad de expresión y con el derecho humano a la información, recordó.
El antiguo IFAI hizo importantes aportaciones para crear el actual INAI con todas sus facultades y alcances, mientras las organizaciones de la sociedad civil involucradas también hicieron su parte.
De todas formas, Peschard Mariscal recordó que aún está pendiente “cerrar la pinza” a través de las siete leyes pendientes (particularmente las últimas dos), del Sistema Nacional Anticorrupción, que se discutirán en el legislativo en el Periodo Ordinario de Sesiones.
Esto significa que tanto los funcionarios como los ciudadanos sepan que no cumplir con los estándares legales de transparencia, puede tener consecuencias y hay autoridades dispuestas a hacer valer tales leyes.
Se tiene que ir venciendo poco a poco la resistencia de quienes no quieren comprender que la información pública le pertenece a todos, pero las herramientas actuales ya son un avance fundamental.
Sólo falta que se complete todo el esquema legal y, desde luego, que como sociedad transitemos el camino del cambio cultural tanto por parte de las autoridades como de los ciudadanos.
Aunque la ruta todavía es larga, estimó que ya tenemos bases sólidas para el ejercicio del derecho a la información, habida cuenta de que hoy día, con la tecnología disponible, es mucho más difícil ocultar la información.
Y quienes sientan la tentación de hacerlo así, deben saber que, al menos en la discusión legislativa, hay consenso de las diversas fuerzas políticas, en el sentido de que las leyes sirvan para sancionar y procesar a los funcionarios que oculten la información o sean corruptos.
De hecho, se están cerrando las vías para la corrupción, pues hoy no sólo el gobierno directamente, sino entidades como los partidos políticos, sindicatos, fondos y fideicomisos públicos, tienen la obligación de transparentar su información.
NTX
