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El investigador Manuel Anaya se pronunció por la creación de una comisión nacional del suelo o para el manejo sustentable de las tierras, con presupuesto propio y un reglamento, que resuelva la situación de degradación que afecta al país.
El director del Centro Internacional de Demostración y Capacitación en Aprovechamiento del Agua de Lluvia (Cidecalli) detalló en un documento que la degradación del suelo se ha recrudecido en los últimos 60 años y ahora afecta 142 millones de hectáreas, equivalente a 71 por ciento del territorio nacional.
De esa área, al menos 30 millones de hectáreas están en un proceso donde es casi imposible revertir la degradación del suelo, en el resto se tienen procesos de degradación de leve a severo y sólo quedan 60 millones de hectáreas con condiciones adecuadas para la siembra, alertó el también investigador del Colegio de Postgraduados (Colpos).
El especialista destacó que en el caso del uso de la tierra en México, casi 24 millones de hectáreas están dedicadas a la agricultura: 18 millones son trabajadas bajo condiciones de temporal y seis millones, bajo condiciones de riego.
De no aumentar la fertilidad y la productividad de la tierra, “no vamos a poder hacer frente a la escasez de alimentos y de agua, o sea que sin suelo no hay agua, no hay vegetación, no hay alimentos”.
Un claro ejemplo de la erosión es que el Desierto de Chihuahua se extendía hasta San Luis Potosí hace 50 años, pero actualmente ya avanzó y pasa por Hidalgo, Puebla, Tlaxcala, llega a Veracruz y en el valle de Perote se nota una vegetación de zonas áridas y llueve menos, lo que es un efecto del cambio climático.
Lo anterior “nos da mensajes de que México está en peligro, porque la productividad de las tierras va disminuyendo y son procesos que no se observan con claridad en el corto plazo, pero podemos decir que un centímetro de suelo que se pierde equivale a entre 100 y 150 toneladas por hectárea”, advirtió.
Anaya Garduño expuso que ello no se percibe a simple vista, pero es una gran cantidad de suelo que se pierde y esa parte superficial es la capa que contiene elementos orgánicos que permiten absorber más agua y es donde está la mayor cantidad de nutrimentos para las plantas.
De ahí la urgencia de crear una comisión nacional del suelo o comisión nacional para el manejo sustentable de las tierras que sea de nivel federal, tenga un presupuesto propio, un decreto que le dé origen y un reglamento correspondiente.
Fuente: Notimex
