El personal de enfermería en hospitales recibirá una capacitación para mejorar la colocación de catéteres, los cuales se usan para administrar suero y medicamentos, entre otras sustancias, en los pacientes y así evitar complicaciones médicas.
La directora de Enfermería en la Dirección General de Calidad y Educación en Salud de la Secretaría de Salud federal, Juana Jiménez Sánchez, explicó que la preparación se realiza a través del Programa Nacional de Capacitación en Terapia de Infusión.
Se prevé que reciban la capacitación alrededor de 300 profesionales de la salud que están a cargo de las clínicas de catéteres, los cuales tendrán que replicar el conocimiento en su institución para que llegue a todo el personal.
La funcionaria detalló en una entrevista con Notimex que además de la Secretaría de Salud, en la capacitación de catéteres periféricos cortos participa la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de la Marina (Semar).
Además, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Petróleos Mexicanos (Pemex), entre otras instituciones públicas, así como hospitales privados como el ABC.
Este año se capacitará a los líderes de las clínicas de salud de 19 estados y el resto el próximo año, con lo que se prevé que 60 por ciento del personal esté capacitado en 2016.
El programa, que comenzó en el Hospital Juárez de México en el Distrito Federal, busca actualizar los conocimientos en el personal de enfermería, pues cada vez surgen nuevos materiales que son menos agresivos con las venas, indicó Jiménez Sánchez.
También pretende concientizar sobre la importancia de llevar a cabo el procedimiento apegado a los estándares, entre los que se encuentra el que el paciente solo se puncione una vez, para evitar lesiones en las venas y complicaciones.
Los catéteres periféricos cortos son dispositivos médicos de un material que no daña las venas y acceden al sistema circulatorio para introducir líquidos como medicamentos, además, se utilizan en la mayoría de las hospitalizaciones de los pacientes.
En caso de no colocar bien el catéter, pueden salirse y quedar en un lugar incorrecto, lo que puede provocar flebitis, una inflamación de la vena que ocurre con frecuencia que causa dolor, enrojecimiento e hinchazón, y hasta una infección en la zona.
“Se pretende dejarle muy claro al personal de enfermería que tienen que estar revisando de manera permanente este catéter para que no vaya avanzando esta complicación”, afirmó Jiménez Sánchez.
Otra de las complicaciones son lesiones o rupturas en las venas, así como la irritación derivada de una incorrecta instalación de estos dispositivos, con lo cual medicamentos o soluciones muy agresivos pueden dañar las paredes de las venas, agregó.
NTX