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La Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) urgió a aplicar en el país una estrategia clara y efectiva de prevención de consumo de drogas en general –legales o ilegales- con resultados medibles y dirigida a la población en general.
En rueda de prensa Consuelo Mendoza García, presidenta del organismo, planteó que más allá de los debates para discutir la despenalización de la mariguana es urgente “crear políticas públicas que ayuden a las familias y a la sociedad en general a prevenir las adicciones”.
Consideró que esas estrategias deben estar orientadas a reducir los índices del consumo actual del enervante o de cualquier droga legal o ilegal, pues afectan seriamente el gasto que realiza México para atender los problemas ocasionados por esos consumos y a la persona en su salud física, mental y emocional.
Acompañada por el director general de la UNPF, Carlos Aguirre Marín, destacó que tan sólo en 2010 México gastó más de 45 mil millones de pesos en atender enfermedades relacionadas con el consumo del cigarrillo, según el Consejo Mexicano para el Control del Tabaco.
Además, la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes 2014 muestra que la mariguana es la droga de principal consumo tanto en secundaria como en bachillerato. El consumo en el último año alcanza a 13.2 por ciento de los hombres y a 11.2 por ciento de las mujeres.
Asimismo, sin considerar el tabaco y el alcohol, estadísticas de Centros de Integración Juvenil de 2014 reportan que la mayor parte de las personas que solicitan ayuda señalan que la mariguana es la droga que los lleva a tratamiento, es decir, la de más impacto.
La presidenta de la UNPF insistió en la necesidad de que el legislativo impulse leyes que favorezcan la integración familiar como una forma efectiva de combate a las adicciones.
También de que haya una mejor educación en el país y generar fuentes de trabajo que permitan a los jóvenes mexicanos tener mejores oportunidades.
A la sociedad en general pidió rescatar los espacios públicos e incentivar actividades culturales, deportivas, sociales y culturales donde niños y jóvenes puedan desarrollarse integralmente y subrayó que “la familia y la escuela son los ambientes protectores por excelencia”.
NTX
